Spotify llevó a Ciudad de México uno de sus proyectos más destacados del año con la apertura de “De Puerto Rico Pa’l Mundo”, quien este 2025 fue reconocido como el artista más escuchado del mundo en la plataforma de streaming.
La activación, disponible del 5 al 7 de diciembre en la colonia Roma Norte, permitió a los fanáticos adentrarse en el universo de DeBÍ TiRAR MáS FOToS, el álbum más reproducido del año según el último Wrapped de Spotify, y celebrar el impacto global del artista puertorriqueño.
Un recorrido por el mundo de Bad Bunny
El espacio ofreció diversas atracciones que reflejaron la creatividad, estética y estilo del llamado “Conejo Malo”. Entre los elementos más destacados se encontró una réplica del cuarto de Concho, personaje recurrente en los videos y la narrativa visual de Bad Bunny, cuyo diseño contó con supervisión del equipo creativo del propio artista.
Además, el público pudo capturar momentos fotográficos en muros diseñados con iconografía del álbum, experimentar un área que evocó una pista de baile con música ambiental seleccionada por Spotify, así como espacios con mesas de dominó y otros elementos culturales que resonaron con la identidad puertorriqueña y la comunidad de seguidores.
Celebración global y música que trasciende fronteras
La experiencia de Spotify en Ciudad de México formó parte de un recorrido internacional que también llegó a ciudades como San Juan, Madrid, París y Bogotá, con la intención de acercar a los fanáticos con la música, cultura y narrativa de Bad Bunny a través de instalaciones físicas únicas.
Esta iniciativa respondió al logro sin precedentes de Bad Bunny en 2025, cuando superó 19 mil 800 millones de reproducciones en Spotify, reafirmando su posición como el artista más escuchado del año a nivel global por cuarta vez en su carrera. Su álbum DeBÍ TiRAR MáS FOToS encabezó las listas de reproducción en todo el mundo, consolidando su impacto cultural y musical.
Experiencia para los fans y vínculo con la música
Para acceder a “De Puerto Rico Pa’l Mundo” fue necesario un registro previo, con cupo limitado y entrada gratuita, lo que generó gran expectación entre los seguidores de Benito Antonio Martínez Ocasio. El espacio buscó crear una conexión emocional y cultural entre la audiencia y el legado artístico del intérprete, celebrando no solo su música, sino también sus símbolos visuales y narrativas propias.
