Regresan las subastas más impactantes del país: lo decomisado al crimen organizado se convierte en esperanza
En una escena que parece sacada de una serie de televisión, pero que ocurre en la vida real, el Gobierno de México vuelve a poner en el centro del reflector un acto de justicia social: las famosas subastas del INDEP, donde lo que alguna vez fue símbolo de corrupción, ahora se transforma en bienestar.
A partir del 25 de julio y hasta el 6 de agosto, se llevará a cabo la primera subasta en línea del año organizada por el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP), donde se ofertarán 218 bienes inmuebles y más de 145 mil bienes muebles, entre ellos: casas habitación, terrenos, autos de lujo, joyas, maquinaria, locales comerciales y hasta activos financieros.
El toque más poderoso de esta subasta no está en el lujo, sino en el destino: todo lo recaudado será destinado a Centros de Salud y Hospitales en los municipios más necesitados del país, según lo anunció la presidenta Claudia Sheinbaum en su conferencia matutina, conocida como “Las mañaneras del pueblo”.
“Lo robado se convierte en salud para quienes más lo necesitan”, enfatizó la mandataria.
Subastas con sentido y justicia
Mónica Fernández Balboa, directora del INDEP, explicó que estos bienes provienen de procesos judiciales, embargos y aseguramientos realizados por diferentes instituciones. Y aunque su origen esté relacionado con delitos, su final será muy distinto: se convertirán en oportunidades para comunidades vulnerables.
Además, en paralelo, continúa el Tianguis del Bienestar, una iniciativa que lleva ropa, utensilios, herramientas y más a familias de bajos recursos. Solo en Guerrero y Oaxaca, se han entregado más de 1.4 millones de bienes y 63 toneladas de artículos a casi 36 mil familias. Las siguientes entregas se harán del 4 al 8 de agosto en municipios de Guerrero.