En México, la salud mental sigue siendo un tema urgente y, muchas veces, invisibilizado. A pesar de que afecta a millones de personas cada año, aún existe un gran estigma en torno a trastornos como la depresión, la ansiedad o el estrés crónico. Pero… ¿por qué es tan importante hablar de esto?
Una realidad que no se puede ignorar
Según datos de la Secretaría de Salud, más del 15% de la población mexicana ha presentado síntomas de depresión o ansiedad, especialmente después de la pandemia de COVID-19. Sin embargo, solo 1 de cada 10 personas recibe atención especializada.
Además, México es uno de los países con mayor tasa de suicidios entre jóvenes en América Latina. Cada día, perdemos vidas que podrían haberse salvado con atención oportuna, espacios seguros para hablar y políticas públicas más efectivas.
Romper el silencio, salvar vidas
Uno de los principales retos en nuestro país es el estigma social. Muchas personas temen ser juzgadas si hablan sobre su salud mental. Esto provoca que no busquen ayuda, lo que puede empeorar su estado y afectar su calidad de vida.
Es fundamental entender que cuidar tu salud mental no es un lujo, es una necesidad. Así como vamos al médico por una gripe o un dolor de estómago, también deberíamos normalizar ir con un psicólogo o psiquiatra.

¿Qué se necesita?
- Más acceso a servicios de salud mental en todo el país, especialmente en zonas rurales.
- Campañas de concientización que informen, eduquen y eliminen estigmas.
- Educación emocional desde la infancia para que las nuevas generaciones aprendan a reconocer y expresar lo que sienten.
La salud mental es parte de tu bienestar
Dormir bien, manejar el estrés, hablar sobre lo que sentimos, pedir ayuda cuando la necesitamos… todo eso es salud mental. Y cuando la cuidamos, no solo vivimos mejor, sino que también mejoran nuestras relaciones, nuestra productividad y nuestra felicidad.