La primavera en la Ciudad de México no solo trajo calor, ,también una descarga de talento, sonidos experimentales y emociones intensas con la segunda edición del Pitchfork Music Festival CDMX 2025. Durante cuatro días, la capital fue el epicentro de un maratón musical que abarcó desde la electrónica tribal hasta baladas desgarradoras.
Jueves: NAAFI encendió la mecha
¡El colectivo mexicano NAAFI armó la fiesta de apertura en Foro Indie Rocks! con una noche que osciló entre el shoegaze, el punk experimental y sets explosivos de DJ. Untitled (halo) y Luz Luz Luz! abrieron paso a los beats hipnóticos de DJ Fucci, Imaabs y ZutZut, que mezclaron techno, raptor house y hasta clásicos como “Satisfaction” de Benny Benassi.


Viernes: Canciones que acarician el alma
En el Estadio Fray Nano, Rodrigo Amarante conquistó con una velada íntima: solo su guitarra y su voz bastaron para hacer vibrar al público con temas como “Tardei”, “O Cometa” y el icónico “Tuyo”.
Más tarde, Silvana Estrada ofreció un concierto que fue pura poesía visual y sonora: con marionetas flotantes, cuerdas, vientos y una interpretación sublime de “Glory Box” de Portishead. Como sorpresa, invitó al escenario a Bedouine, Tim Bernardes y al propio Amarante, sellando la noche con un mensaje de comunidad y amor artístico.

Sábado: Hip-hop con alma cruda
Earl Sweatshirt trajo el rap al centro del festival con una actitud relajada pero líricas afiladas. Acompañado de su DJ Black Noi\$e, demostró por qué es una de las voces más respetadas del género, conectando con fans que corearon sus versos bajo la lluvia.

Domingo: El suspiro final entre árboles
El cierre fue contemplativo y etéreo. En la Casa del Lago UNAM, Edgar Mondragón junto a IMGN ofrecieron un performance audiovisual que fundió tecnología y naturaleza. Después, James K transformó el bosque en un santuario sonoro donde la gente se recostó en el pasto, dejando que sus sonidos se mezclaran con los pájaros y el agua.

Pitchfork CDMX 2025 reafirma que la música no conoce fronteras ni géneros: solo emociones profundas y momentos que se quedan en el cuerpo.