Dos de los proyectos ferroviarios más ambiciosos del país avanzan con fuerza y prometen transformar la manera en que viajamos entre la capital y dos de las ciudades más importantes del centro del país. Los trenes de pasajeros CDMX–Pachuca y CDMX–Querétaro ya tienen frentes de obra activos, ingeniería básica casi terminada y planes sólidos de conectividad y modernización.
CDMX–Pachuca: velocidad, sustentabilidad y conexión metropolitana
Con 57.6 km de vía doble electrificada y una velocidad de hasta 130 km/h, este tren está diseñado para integrarse con el Tuzobús y mejorar la movilidad de miles de personas que viajan entre Hidalgo y la capital. Las obras iniciaron en marzo de 2025 y actualmente se trabaja en viaductos elevados, talleres y subestaciones eléctricas, sobre todo en zonas como el Parque Industrial Platah y Pachuca.
Además, se ha hecho un importante rescate de flora, fauna y patrimonio arqueológico, sumando valor ambiental y cultural al proyecto.

CDMX–Querétaro: alta velocidad para trayectos interurbanos
Con 226 km de vía doble, trenes que alcanzarán los 200 km/h y más de 5,000 empleos generados, este proyecto es una apuesta por la conectividad nacional. A diferencia del tren a Pachuca, este contempla tramos nuevos fuera de las rutas de carga para asegurar un recorrido más rápido y eficiente. Las obras ya incluyen tecnología LiDAR para levantamientos topográficos, así como el diseño de estaciones y talleres con estándares internacionales.
Se planea usar trenes versátiles: algunos más cortos para viajes regionales y otros más largos para tramos interurbanos.

Buenavista se transforma: nuevo corazón ferroviario
La estación Buenavista también será parte de esta transformación. Se ampliarán los andenes y se revisará su conectividad urbana para hacerla más funcional ante el crecimiento de la red ferroviaria.
Además, estudios de demanda están en marcha para definir el número de trenes necesarios, los recorridos y los hábitos de movilidad actuales de los pasajeros, considerando incluso encuestas sobre si la gente preferiría viajar en tren en vez de autobús o auto.
¿Por qué importa?
Estos trenes no solo facilitarán el viaje para miles de estudiantes, trabajadores y turistas, sino que impulsan una forma de movilidad sustentable, rápida y segura, además de integrarse con los sistemas urbanos existentes.
Con casi 300 km de nuevas vías ferroviarias, México se encamina hacia una revolución en el transporte de pasajeros que promete cambiar nuestra forma de movernos… ¡y vivir!